El Club Gastronómico de Debabarrena agrupa a cocineras y cocineros que ponen en valor el producto local y saber hacer de la cocina vasca.
El Club Gastronómico de Debabarrena agrupa a cocineras y cocineros que ponen en valor el producto local y saber hacer de la cocina vasca.
El Club Gastronómico de Debabarrena agrupa a cocineras y cocineros que ponen en valor el producto local y saber hacer de la cocina vasca.
Declarado Conjunto Monumental, perderse en las calles de Mutriku es descubrir gran parte de la historia de la Costa Vasca.
Situada en el centro de Euskadi, en Debabarrena tienes todo a un paso: montaña y mar, prados y salitre, lo rural y lo urbano.
El Club Gastronómico de Debabarrena agrupa a cocineras y cocineros que ponen en valor el producto local y saber hacer de la cocina vasca.
¡Descubre la esencia de la tradición en nuestro restaurante familiar, abierto desde hace 52 años y dirigido por la tercera generación! Situados en el monte de Soraluze, no solo te ofrecemos gastronomía tradicional, sino también unas vistas impresionantes de nuestra comarca que te dejarán sin aliento.
En nuestra cocina, la frescura es fundamental: trabajamos con productos locales de nuestros propios caseríos, tiendas y puertos, lo que nos permite crear platos y postres caseros que son un verdadero festín para los sentidos. Nuestra carta combina lo mejor de la tradición con toques innovadores, y la parrilla es, sin duda, nuestra estrella.
Ya ha pasado la Navidad, pero en Debabarrena seguimos endulzando el invierno. El 3 de febrero elaboramos el dulce más popular de nuestra repostería tradicional: la torta de San Blas. ¡Acércate a conocerla!
La tradición de elaborar dulces para San Blas no es exclusiva de Debabarrena, pues se encuentra arraigada en varios puntos de Euskadi, como Abadiño o Llodio.
En nuestra comarca, muchas personas todavía elaboran las tortas en casa, y las llevan a la iglesia a bendecir. Según la creencia popular, a San Blas se le atribuyen poderes contra los males de garganta; para ello, además de comer las tortas, hay que llevar a bendecir un trozo de cordón, el cual hay que llevar anudado a la garganta durante nueve días. Pasado ese tiempo, se quema, y confiere protección durante un año contra catarros y otras dolencias.
Para la masa:
Para el glaseado: